María Victoria Verzura nació en Buenos Aires en 1973. Es Licenciada en
Informática (ITBA). Hace varios años comparte la vida con su marido y
recientemente fue mamá. Participó en varias antologías y revistas literarias. Ha
leído en diversos ciclos, como Festival Buen Día y Viajera Visita y
Express-Arte. Publicó su serie Girando,
en homenaje a Oliverio Girondo (Zapatos Rojos), Mar Rosa un tributo a Marosa Di Giorgio (libro-objeto de Colección
Valijita) y Sentir óseo (Viajera
Editorial).
Contacto:
Poemas para disfrutar:
Abierta de par en par
una blanca tela
libre se siente
extendiéndose hasta el
punto máximo
hace formas
envolventes cuerpos
ella jugueteaba sentada
a caballito
una pierna adentro
otra de pie al vacío
se suelta
movimiento continuo
manos acariciando el
aire
abajo el precipicio
solo un suspiro los
separa
¿acaso ella quiere
vencer esa altura?
¿dejarse caer sin
tiempo?
su mirada busca un
punto
un calambre la recubre
todo se hace vertical
se desarme
hasta acabar
Admiro ese conocimiento
y seguridad que te caracterizan
esa palabra justa
en el momento apropiado
la inteligencia también enamora
pero detrás de tanta perfección
¿qué habrá?
¿cuál será tu punto débil?
eso que no podés manejar y varias veces te supera
vos sabías:
el amor no es tan lineal
tan perfecto
el cuerpo varía
las situaciones
el tiempo
las personas
y entonces te descoloca
hay que re adaptarse cada minuto
re aprender a amar
y a ser amado
anoche soñé que te ahogabas
en aguas turbias
y te rescataba
¿acaso ves eso en mí?
la posibilidad de hundirte
para que alguien te rescate y cuide
la vulnerabilidad amigo también es un sentimiento
que hay que experimentar
todo hace al hombre
mejorarse, acercarse
al resto
al aprendizaje eterno
al mundo verdadero
al del sentír
de la equivocación
aceptación y avance
“…Renacimiento
La futura madre aguarda
el descenso del alma
en alas del espíritu
para formar su cuerpo físico…”
Los hijos nos elijen
y nosotros con las
manos abiertas
les damos cuerpo y alma
esas manos que se
extienden hacia arriba
buscando un algo que
dejarles
a ellos que cada día
nos llenan
la flor la lleva en su
pico
tan fuerte como su amor
pájaro fuerte y
brillante
emblema del corazón
plantar un árbol tener
un hijo escribir un libro
planté todas las flores
de mi balcón
planté verdes malvones
que ser hicieron rosas rojas fucsias
colores furiosos
armoniosos colores vivos
trasplanté un pino
enano cuidando regando sus costados para verlo crecer libre
siempre escribí poesía
(primero la escribí para mí como descargo)
siempre busco decirte
algo (primero a mi)
fuerte sensible
perturbador (como yo)
soy tan rebuscada
complicada enroscada
tiro la piedra y me
escondo
pero algo tan fuerte
recalcitrante duro me hizo crecer a golpes
pero algo tan dulce
nuevo amoroso me hizo humana sensible madre
apenas nacido ésta
unión lazo apego fue creciendo fortaleciéndose haciéndose indestructible
¡oh hijo! trascendencia
pura todo mi amor para vos hijo
me quedo mirándote
admirada
me quedo escuchando tus
conversaciones
me quedo extasiada
apenas creyendo mi maternidad
plantar un árbol tener
un hijo escribir un libro
si la vida fuera tan
fácil como eso
si solo con éstas tres
cosas pacientes crecientes relucientes fuéramos felices
***
Aunque Monte Castro no
es mi barrio de origen
es mi lugar por elección
tantas cosas han pasado
la mudanza a nuestro departamento
la primera vez que vine
me pareció un sitio lejano
y a su vez muy luminoso
me gustaba que fuera barrio y que tuviera tantos negocios
me encanta que sea tan familiar
también se produjo nuestro casamiento
y la fiesta quedó guardada en el recuerdo del barrio
Sentir Óseo, mi primer libro, se formó en las paredes de
Sanabria
los festejos con amigos y familia brillaban de emoción
pero lo más importante aún no había llegado:
el nacimiento de Francisco
¿te acordás bebe la primera vez que salimos juntos a la
calle?
salida obligada, comprar pañales
Jonte y Bermudez, ¡esas 10 cuadras fueron eternas!
¡cómo cambia todo, hoy casi podrías ir caminando solito!
juntos vos y yo descubrimos muchos rincones
varios espacios verdes
la plaza de All Boys por ejemplo
y tus primeras subidas en la hamaca
ahí conociste lo que es caminar sobre arena
correr a las palomas y acariciar algún perro bonachón
en la plaza San Pedro descubrimos la Iglesia
y una ceremonia tan casual como emocionante te bautizamos
nuestros negocios preferidos son los de ropa de niños, los
todos por 2 pesos, jugueterías
y la calesita de la Galería
¿te acordás cuando te subí a la calesita, Franchi?
tu carita estaba iluminada
hoy tu predilecto es el castillo inflable
sos tan enérgico que una hora de saltos no te alcanza
desde tu llegada cada espacio se fue transformando
pinté cubos para armar tu rincón de juegos
ahora me falta la sillita
sentada alrededor de la mesa escribo
y te dejo salir al balcón
te veo reír
saltando, gritando, mirando a la gente y a los colectivos
me siento tranquila de saber que hicimos una buena elección
para que crezcas feliz
***
“…Asciende
como la hiedra por la vertical de la cruz para alcanzar tu estrella…”
Las hojas de la hiedra
crecen subiendo
escalonadas
a veces hierro a veces
nubes
copos de verde
alumbran el camino
piedras y escombro
amor y esperanza
fomentan el paso
la estrella
está tan cerca como
lejos
no hay sendero vertical
solo una luz tenue a
seguir
y al final -si se
llegael
alma del artista