miércoles, 30 de julio de 2014

Alejo Steimberg en musicalpoesía!

La poesía de Alejo Steimberg, la ilustración de Bruno Rota en musicalpoesía!







24/7/2014 en Rechazando Coimas. Video por Gaby Tavolara.




domingo, 27 de julio de 2014

Pablo Milani entrevista a Natalia Monsegur

Por Pablo Milani

Entrevista Natalia Monsegur


Natalia Monsegur: “La poesía es un espacio de rebeldía necesaria”

La conocí una noche casi como todas las demás en el ciclo de poesía Rumiar Buenos Aires, e inmediatamente quedé impactado por su combinación en sus palabras de viajes y poesía. Luego de conseguir su libro, Casa de viaje (Viajera Editorial, 2010), la contacté para esta entrevista que de a ratos quiso ser charla y fue también reiteradas veces interrumpida por el que escribe. Fue una tarde /noche de otoño de lluvia en un bar del siempre barrio porteño de Palermo. Había sólo una mesa ocupada, que se desocupó ni bien ingresamos al lugar, además de la nuestra. La luz también era de otoño, amarilla, tenue. El resto fue música y lluvia de fondo. La entrevista fue atravesada por la inconfundible voz de la cantautora francesa, Zaz.
Natalia Monsegur nació en 1983 en Barcelona (España), a los nueve años se mudó con su familia a Buenos Aires. Es Licenciada en Letras de la UBA. Formó parte del taller literario de Ana Guillot. Editó Casa de Viaje (Viajera Editorial, 2010) Hoy se dedica a la docencia. Dice que ahora prefiere escribir ficción y que siempre está bueno el ejercicio de la escritura porque, entre otras cosas,  es un acto apartidario.


¿Cómo surge Casa de viaje?
Surge a partir de cosas que escribí a partir del 2008, (el libro es de 2010). De las memorias de los viajes y las fantasías de los viajes futuros o paralelos. El libro es mucha escritura acumulada. Llevó un tiempo darme cuenta, no sola, sino con el taller que asistía en ese momento. Había líneas, había temas que volvían y volvían. Y ahí me di cuenta que había temas en los que yo me quería enfrentar. Creo que eso está claro en el libro. A veces los temas que uno quiere escribir están para uno muy claro y para otros no. Fue darme cuenta de que había algo que me apasionaba y quería seguir escribiendo sobre eso. Habían palabras, movimientos y llegó un momento donde había mucho material también. Hubo mucho incentivo también de mi profesora de taller en ese momento, Ana Guillot. Generalmente pasa eso, de tener alguien que te lleva de la mano cuando uno es más pequeño. Y sucedió. Y fue muy placentero el armado del libro. ¿Cómo se ordena esto? ¿Cómo puedo jugar con eso? El libro tiene dos partes. En realidad,  yo quería que el libro estuviera 




En Casa de viaje hay varias vidas en una que se mueve entre pasado, presente y futuro.
Hay humor. Es muy importante el vínculo familiar además.
Y todo esto escrito en un total estado de libertad.
¿Cómo pensaste la estructura del libro?
En la casa de arriba y la casa de abajo, hubo un pensamiento. Dialogan entre sí. Hay mucho juego. Una mayor libertad a la hora de escribir como vos decís. En la casa de abajo encontré la prosa y me sentí muy cómoda con eso y después seguí por ahí. 

¿Influye la ubicación geográfica a la hora de escribir?
Influye moverse yo diría. Moverte y darte cuenta que te estás moviendo. Cuando uno se mueve y cuando uno viaja tiene la curiosidad o las ganas de estar viendo cosas nuevas. Entonces ahí se te despierta algo. Se te hacen nuevas sinapsis en la cabeza. Pero también es un viaje, y un viaje hacia el otro.

¿Qué crees que cambia la poesía?
Para mí es un espacio de rebeldía necesaria para la vida. La poesía es un género que te hace ver las cosas de otra manera, patas arriba. Es alimento. Las cosas en realidad no son como las vemos, como nos la hacen ver. La poesía es el lenguaje que más fuertemente se pone en evidencia con eso. Es un mundo mágico.
En pleno siglo XXI dominado por las redes sociales, la inmediatez, las distracciones, la difícil reflexión en soledad. ¿Qué papel crees querepresenta la poesía?
La verdad que eso no se puede evitar. La “tipa” está ahí, firme. Preguntándote: ¿Cómo vas a hacer para escribir? Pero también hay una necesidad ahí. Está el que necesita escribir, más allá de esa inmensa distracción. Hay que seguir escribiendo. Hay que hacerlo. Quizás hace dos semanas que no escribís nada, y estuviste muy bombardeado. Facebook es una locura, estás recibiendo información todo el tiempo. Igual está bueno hacer poesía que todo eso hoy porque como es rebelde, naturalmente, y apartidaria además.
Hiciste varios cursos de cine. Uno de ellos en Cuba. Otro con Campanella
¿Cómo llegas al cine? ¿Qué te atrapó?
Creo que llego por la ficción y es una súper herramienta para escribir ese género. Es muy difícil hacer cine después. Porque necesitas equipos, mucho dinero. No es imposible, se puede lograr. Estudié cine para escribir mejores cuentos, y me ayudó. El cine no deja que el guionista te engañe. Que engañe al espectador. Como un buen cuento policial. Vos no podes crear pistas falsas. Todo se nutre de algún modo.

¿Qué es lo próximo a Casa de viaje?
Ahora vienen cuentos. Hay cuentos cortos, largos. Estoy trabajando en eso.

¿Qué lees?
Leo muchas cosas diferentes al mismo tiempo. De repente tengo ganas de leer teoría o algo más concreto, así como más duro. Leo filosofía, o cosas de Ciencias sociales. Y esas cosas me hacen pensar desde otro lugar. Hace poco leí Bernhard Schlink y me encantó. Leo Psicología también.   A veces necesito ordenarme y decir: esto lo termino.

¿Barcelona vs Buenos Aires?  
Barcelona es la infancia. Es acercarme a un mundo mágico, como de leyendas. Porque lo que tienen los españoles, que acá en Buenos Aires se perdió mucho, es que mantienen muchas tradiciones, entonces pasaban cosas que yo flasheaba  de chiquita. Hay todo un imaginario que es muy nutritivo para el niño y a mí me nutrió un montón. Las festividades, pero medias profanas, porque está todo esto de lo carnavalesco que no es muy religioso. Mi familia no es religiosa, yo tampoco lo soy. Yo me metía en ese mundo de gigantes disfrazados. Después estaba también el hecho de que había montañas y había mar en Barcelona, así que tuve otro contacto con la naturaleza. Mi papá es navegante, así que nos metía en un barco y al mar. Y en el colegio tengo mucho recuerdo de excursión, de frutos silvestres, pero es la infancia. Uno la idealiza. 

Y Buenos Aires es como la novela de aprendizaje. Los amigos, los amores, el salir a la noche. Yo disfruto mucho la ciudad. En ésta época especialmente (otoño) me encanta. Y hoy por ahí Buenos Aires se ha transformado. Yo tengo 31 años y pensás que quizás esa novela se termina. Y Buenos Aires empieza a ser la ciudad donde vos estás y empezas a intervenir en ella. Y pensas cuál va hacer tu compromiso con esa ciudad. Es un caos. Pero a veces me encuentro caminando en calles que no puedo creer, de noche sobre todo. Siento que me llevan a otros lugares y me sigue asombrando la belleza.

Enlace a la nota en la revista Aglaura:

viernes, 25 de julio de 2014

mirarse en el espejo de la noche - Belara Michán

mirarse en el espejo de noche
deber ser un poco raro
para los ojos del día
levantar una pierna
buscar
el equilibro antes que el sueño
y entonces


y entonces sí


con la tibieza de brazos como alas
me miran de frente
dos ojos espejados
negros, de pupilas brillantina
da ganas de soplar
derramar
empaparse la cara
con su oscuro rubor


porque la noche planea alrededor del cuello
o la muerte
o la desconfianza:
ojos y brazos, brillan
(la sutileza del mirarse
es tan grave
tan simple
tan fugaz
como mariposa en un cuerpo gusano
inquieta)


¿pero hasta qué hora ven los ojos
esta exhalación radiante
dentro de la tapa, de esta oscura caja
es decir:
cuerpo?


las alas desplegables de mis ojos
se enroscaron
desde el pelo hasta la raíz
me enroscaron
y ahora, convivo con pájaros
hambrientos de belleza
me llevan a caminar
bailan
en el reflejo líquido de mi cuerpo de noche
me hablan
me mueven los brazos y los gestos
llevan mi cabeza
por lugares impensados
sin saber
que en todos sus pasos
hasta en los más simples
están buscando mi ojo denso
–íntimo–
–ilegible–
su único secreto


(ya no sé estar
ya no sé irme
o cómo
y aunque pudiera
no encuentro los ojos para mirarme
fuera del espejo
de la noche
ahí, donde hay algunas salidas
pero no veo entrada
ahí, indecible, atorado:
cuerpoadentro)


Belara Michán, cuerpoadentro.
Viajera, 2011.



miércoles, 23 de julio de 2014

musicalpoesía! 24/7 en Rechazando Coimas


Juan Lázaro Rearte en musicalpoesía! - 24/7



7.
cuerpos pequeños
que a la distancia del tiempo
sugieren espacios donde viven.
a mi la distancia me acerca
donde crecen
trincheras al sol, puntos de observación

13.

niño cuelga brazo madre
fosa abierta ya cerrada
boca abierta, siempre abierta.
Palabra clama para nadar.
Yo era un chico sigue así
bajo las estrellas pequeños agujeros
¿Quién va a abrirlos y ver más allá?

25.

el cadáver quiere salir de la fosa
el cadáver vestido con poco dinero
y sin equipaje maneja hasta mendoza
lo envío así, sin preguntas ni maquillaje.
Mi cadáver persiste año tras año,
sube con ansiedad la piedra andina
busca desde dónde tirarse pero
cuando arriba todo se ve plano,
y la cultura de luces como un cielo al revés.
Cuando el frío de la noche baja,
baja con las heridas abiertas y resecas
y camina por la peatonal.

46.

ascendíamos entre almohadas el viento vuelto piedra
la claridad de la cima se reflejaba en tu cara.
yo trataba de asustarte con historias del XVIII
para distraerte de la brusca, reiterada, pulsión de
los pájaros, que picoteaban del otro lado del cielo
que eran como agujas golpeando y rasgando el cristal bendito
y siempre punzando con sus ojos de estrellas,
y mi garganta llena de valor para agotarse en gemidos
de un hombre falto de entrenamiento, un cary grant
de los tropiezos de comedia.
Sé que mis latas están vacías
que el mapa se extendió ahí abajo entre luces de casas
entre luces de casas que cierran sus postigos,
que cierran con un golpe para atrapar la luz que se escapa
para robarnos de inmediato la luz del camino
y sin embargo subimos, entre bromas y recuerdos de los años,
y en un momento, cerrando los ojos levantás la mano:
señalás a lo lejos y presentimos el mar como una pendiente negra
espesa, de descargas de luna nueva. se queja la madera apretada de un barco
explorador arrinconado por las islas de los árboles gigantes,
ahí un astrolabio señala el norte hinchado de presencia,
se alumbran inviernos y desde la proa una mano responde tu saludo



De últimos 55 min de la mañana (2009)

Juan Lázaro Rearte es Doctor en Letras por la Universidad de Buenos Aires y docente de Literatura Alemana por la misma universidad. Tradujo obras de Klinger, Humboldt y Schiller, entre otros autores. También es Investigador Docente en la Universidad de General Sarmiento (IDH), donde se desempeña en los Talleres de Lectoescritura y en Estudios de la Literatura Moderna. Es parte del grupo teatral Los últimos tres, con el que estrenó Bulbus, de Anja Hilling (2011), además de textos propios. Como poeta participó de numerosas lecturas y performances, y es autor de Póstuma (Cencerro, 2004), Happy Hour (Cencerro, 2005) y de Últimos 55 min de la mañana (Flora y Fauno, 2009). Actualmente, prepara un nuevo libro de poesía: Teoría del archipiélago.




martes, 22 de julio de 2014

Alejo Steimberg en musicalpoesía! - 24/7

 Patrimonio


La mano generala mostrando
hacia la izquierda
la playa con el pequeño muelle;
la sonrisa mutante.
La otra mano que muestra
a la derecha
la filita de dunas
con
camino de rubias;
el jopo que consiente.
Las rubias y los gordos
como telón de fondo movedizo.
La colina con forma que perturba:
con temblor de bigotes el Hurtado
muestra esto a la joven promesa,
pero Tonto Mutante es tonto al fin,
cosa que tranquiliza.
El general en la cima con alivio
y cataplum:
en río se convierte la colina
por virtud de la oreja poderosa
licuefaccionadora.
Las lágrimas hurtadas van a unirse
al nuevo río que perdió forma de teta.
Nada respeta hoy la juventud,
dicen los afligidos ojos generales;
pero lo que se ve
es que tan tonta no es.
La destrucción de un símbolo requiere
al menos de una buena puntería;
de puntería simbólica
que no es forma menor de inteligencia.
Cuídate de la sonrisa del tarado:
te hará bajar la guardia
dirase en un tal vez el general
con un nuevo respeto
por su tontomutante protegido.

Alejo Steimberg

Alejo Steimberg nació en Buenos Aires en 1974. Es Licenciado en Letras por la Universidad de Buenos Aires y está escribiendo su tesis doctoral en literatura fantástica (Universidad de Extremadura). Ha sido premiado en distintos concursos literarios y ha publicado en antologías y revistas en papel y en la Red en Argentina, Colombia y Bélgica. Ha leído en festivales y ciclos de poesía en Buenos Aires, Bélgica y Francia. En 2004 salió su libro p por Ediciones Vox (Bahía Blanca, Argentina), y en 2007 la antología que realizó y tradujo en colaboración con Laura Calabrese: ¿Bélgica? 6 poetas jóvenes de lengua francesa (Vox). Administra el blog El teclado excéntrico (http://enanosenelefante.blogspot.com), dedicado a la construcción de un mapa de la poesía escrita en español en países de otras lenguas, y el grupo Facebook La Internacional de Poesía Expatriada. Vive en Bruselas.  



Fabio Rivas Rivera en musicalpoesía! - 24/7



Soy la sangre 
De los fracasados 
La mordida de los perros
Que agonizan en la calle 
El silencio de las fotos 
Y el grito reproducido 
De una generación enferma 

Soy tu madre pariendo tus ojos 
Tu padre borracho 
Bailando rock and roll 
Soy la espada y la pared 
Los desechos de la luna 
Y las flores incendiadas 
De esta juventud 

Soy la duda 
Que no quiere nadie 
Y la certeza 
Que quieren todos 

Soy el diafragma del canto 
El maquillaje de los muertos 
El emigrante 
El demente 
El suicida 

Soy tan imperfecto 
Como una estrella 
Y tan frágil 
Como Dios 

Soy el huracán 
Y las casas de madera 
El traductor 
De los golpes 
El capitán 
De las bestias 

Soy el hombre 
Más hermoso de este mundo 
Y he venido a arrodillarme 
Ante tus pies.






Fabio Rivas Rivera nació en San Salvador, El Salvador. Actualmente vive en Buenos Aires, donde estudia lenguaje audiovisual en el IUNA, y organiza desde hace un año el ciclo de poesía “arrancándonos la piel”. Fabio es autor del libro de relatos cortos “siete maneras de estar muerto” y poemario “el mundo se derrumba y nosotros nos masturbamos”. Actualmente trabaja en la edición de su segundo poemario.







domingo, 20 de julio de 2014

Anticipo de "Agua o niño que corre" - Eugenia Coiro






 ligero oscurecimiento
aliento piel
tu aliento
mi piel
cerca
cerca
el cuerpo pide cuerpo
pide cuerpo



el monstruo bicéfalo emerge
en medio del lago el silencio atónito del día
criaturas temerosas expectantes azoradas

lo natural primigenio oculto

un sapo gigante
un monstruo masculino perfecto
hombre

quiere tragarme como a un insecto






Eugenia Coiro, Agua o niño que corre.
Próximo título de Viajera.

Otto Piene

sábado, 19 de julio de 2014

Poesía herida - Reseña de Pasos que se alejan

PASOS QUE SE ALEJAN 
antología poética 1978-2013
Fernando Ortiz
Por José de María Romero Barea

En el soneto “Franz Kafka” (p. 161), incluido en la antología Pasos que se alejan (Editorial Viajera, 2014),Fernando Ortiz imagina al autor checo a orillas del Moldava, hablando con su amigo Gustav Janouch sobre “una vieja Praga que se esfuma y se esconde”; sobre la enfermedad, “una prueba, una fuente para que el hombre ahonde/ a fondo en su interior hasta llegar adonde/ la desdicha le enseñe la verdad promisoria”. Kafka se queja de que “ya no hay buenos ni malos sino hombres sonámbulos/ sin libertad, aislados, sin esperanza alguna”. Los “funámbulos” provocan disturbios y denuncian el abuso, “ladran a la luna” en vez de dedicarse a “Dios y la poesía”. El soneto retoma la vieja polémica entre canon y divergencia, degeneración y costumbre. El poema es advertencia del degradado mundo en que vivimos.
Los poemas de Fernando Ortiz (Sevilla, 1947-2014) son, en esencia, defensa de la función terapéutica y social de la poesía. En otro poema de la colección, “23 de febrero de 1810” (p. 43), Blanco White abandona el puerto de Cádiz en el barco “Lord Howard”, rumbo a Inglaterra. A través de una secuencia no lineal, de cortes repentinos, Blanco White describe la escena: “Blancas de cal las casas que en el alba se alejan. / Un tibio sol de invierno va atemperando el aire. / Desde el mar los tejados menos blancos parecen”. Pronto la narración se ocupa del discurrir del intelectual que se dirige al exilio: “Temo la soledad. Y la melancolía/ me invade…”. El tono del poema es controlado, está escrito con una prosodia tradicional. Y sin embargo, asistimos a una angustia profunda, de raíz personal y sobre todo cultural: “Si miro al mar veo sólo mi presente inestable, / precario, tornadizo…”. El agua es símbolo de distancia. El barco avanza al igual que los versos, “sigue seguro su camino”. El viento “ajeno y libre/ despeina mis cabellos, acaricia mi cara, / templando mi inquietud ante el vasto horizonte.” El poema que Blanco White escribe en el aire es tentativa de ordenar el mundo, de hacer que las cosas sean, o al menos parezcan, coherentes: “Amo la libertad. Mi amada no es fácil”.
Los poemas de Pasos que se alejan retan y reemplazan a la tradicional voz lírica. Los monólogos dramáticos se suceden en polifonía de oradores. Los restos de Juan de Arguijo, el “Caballero veinticuatro” (p. 55), no por casualidad descansan cerca de la tumba de Bécquer, “ante la que tantas veces meditó Cernuda”. El final del poema es un guiño cómplice a los tres poetas sevillanos: “¿Dónde va el caballero/ con paso que se alza sobre el gris de las horas?/ Allá, allá lejos; / donde no existe el olvido”. En “Oda al regreso del rey don Sebastián” (p. 66), Pessoa vaga por Lisboa como por un museo, “entre berninescos carruajes de embajadores, nuncios, reyes, / príncipes e infantinas”. La composición, de ritmo sincopado, nos muestra al portugués “vestido de negro como el Rey que Dios guarde, / sosteniendo entre sus dedos, fumador empedernido, / un cigarrillo que se consume como sus recuerdos”.
El poema “Signos vanos” (p. 87) se basa en y rompe en pedazos la alta cultura de la juventud cultivada de Ortiz: fragmentos de la mejor tradición francesa (“Swann pide un coche que le lleve al salón de Madame Verdurin”) y anglosajona (“el cónsul inglés Firmin ha salido de smoking”) se entremezclan con ecos de la cultura latina, sobre todo andaluza (“Luis Cernuda esperaba el acorde”) e italiana (“Eugenio Montale, no podrás ver (…) el amarillo de los limones que deshielan tu corazón”). Los poetas célebres conviven con los menos conocidos (“Ricardo Molina, bajo la pálida luz del moriles, escucha el trueno sombrío y sordo del flamenco”).
Su “Homenaje a Antonio Machado” (p. 110) es un recorrido por los principales hitos del poeta sevillano fallecido en Collioure. Ortiz nombra sus libros (Juan de Mairena), sus lugares (“Segovia, Soria y también Baeza”), sus versos más populares (“la plaza y los naranjos encendidos”, “ligero de equipaje”), e incluso los nombres de intelectuales y poetas amigos (Ortega, JRJ). El poema es, al mismo tiempo, una búsqueda de consuelo a través de la cultura; después de la enumeración sentimental, estalla la angustia con una línea tomada del propio Machado: “buscando a Dios entre la niebla siempre”. Ortiz sabe que Machado es ateo. La alusión a Dios, tan cerca de la alusión a la muerte (“Algún día también yo iré a Collioure”) sugiere la paz del agotamiento, en lugar de aceptación.
Fernando Ortiz obtuvo el Premio de Poesía Vicente Núñez (1991) y el José María Pemán (1989), además del Premio Andalucía de Periodismo (1978). Pasos que se alejan se ocupa de su obra poética (1978-2013) y ha sido editado por Marina Bianchi. La hispanista italiana ha escrito el estudio introductorio que delimita, enfoca e ilumina la colección. Los poemas incluyen notas que explican las partes de su estructura y el sistema que emplea el poeta sevillano, además de aclarar algunas de sus referencias más oscuras. La poesía de Ortiz es un intento por encontrar una manera nueva de escribir poesía, teniendo en cuenta la tradición. La verdad de sus poemas no siempre es agradable. Ortiz tiene un diagnóstico de su, de nuestra enfermedad, pero no está seguro de la receta. Tal vez por eso, Pasos que se alejan es una antología tan necesaria.

Sevilla 2014


Nota publicada en: 


jueves, 17 de julio de 2014

Nicolás Di Candia en la SADE

Ciclo Nuevas tendencias literarias argentinas 
del Centro Cultural de la Cooperación y la SADE

Viernes 25 de julio a las 19hs.: Literatura y nuevas tecnologías.

Participan: Florencia Abbate, Leandro Ábalos Blacha (Ed. Entropía), Nicolás Hochman, Leticia Martin (revista Tónica) y Nicolás Di Candia.

Coordinan: Juano Villafañe y Santiago Alonso.

Casa Leopoldo Lugones: Uruguay 1371, primer piso, CABA.


martes, 15 de julio de 2014

16/7 - ¡Feria editorial y lecturas viajeras en el Matienzo!


¡¡¡Imperdible feria de editoriales independientes en el Matienzo!!! 


LAS MIL Y UNA
encuentro de editoriales independientes

añosluz editora | difusión alterna ediciones | ludwig ediciones | viajera editorial | editorial simulcoop | wu wei | ediciones del bien | tammy metzler

lectura y feria editorial!

matías nicolaci
ezequiel vila
nadia sol
gabriela clara pignataro
enzo campos córdoba
dení rodríguez ballejo
eugenia coiro
karina macció
alejo steimberg (desde bruselas!)
damián lamanna guiñazú
rodrigo arreyes

Miércoles 16 de julio, 19 a 21 hs.
C.C. MATIENZO / Pringles 1249  



domingo, 13 de julio de 2014

An inspector calls - Jan De Jager


Al final del invierno, encontraron muerto a Shlomo en su casucha del callejón más oscuro del gueto. El viejo estaba casi momificado: piel y huesos, los brazos rodeando las rodillas como abrazando un último calor en el centro de sí mismo.
Ese viernes en la Sinagoga, al anochecer, el Rabbi habló de Shlomo. Recordó los tiempos en que un Shlomo más joven visitaba las casas y todavía tenía la milagrosa habilidad de reparar pequeñas cosas a cambio de unas monedas. Reparaba los juguetes mecánicos de los niños, los relojes, y los antiguos y pesados molinillos de café. Con los años, sus manos habían perdido ese don y su dueño esa ínfima fuente de ingresos.
“Pero atención. Shlomo no murió de hambre, ni de sed, ni de frío. No murió por ser pobre o estar enfermo, o viejo.
(una pausa dramática)
Shlomo murió de soberbia y de timidez. Por orgullo, no golpeó la puerta de ninguna de nuestras casas para que le permitiéramos arrimarse al fuego del hogar, con un tazón de borscht en las manos. Y por timidez de no arriesgarse a ser rechazado.”
Recorrió la sinagoga un murmullo de asombro por la sabiduría del Rabbi, asombro que se fue transformando en asentimiento. Cabezas que miraban hacia los costados y luego knikten vigorosamente.
Prosiguio: “Qué bien nos sentiriamos si esa fuera toda la verdad. Qué conveniente y cómodo sería, pero no. Shlomo murió por todas las causas que nombré, pero además porque en todo el invierno ninguno de nosotros, incluyéndome, fuimos capaces de ir a golpear a su puerta para ver cómo se encontraba, o qué precisaba: también murió de abandono y desinterés. Cuántas causas para una sola muerte.”

Ernst Herzl, Historias del Rabbi Ben Ezra, Viena, 1897.
[trad.2010]

Jan De Jager, Relámpagos Vol. I.
Pronto por Viajera




martes, 8 de julio de 2014

Criaturas - María Victoria Verzura

Criaturas
absorben
la sangre
la licuan
escupen
coágulos
podredumbre
queda
entre sus vísceras
los ojos
tapan partes
humanas
no hay manos
ni pies
cuerpos
sin forma.



María Victoria Verzura, Sentir Óseo.
Viajera, 2010.


Arthur Dove

lunes, 7 de julio de 2014

Canastos, Carlos Battilana


El olor proviene de la feria:
sólo canastos y pescados con sus ojos ciegos.
Razón no ha de faltar
a los compradores: por días
el hedor ha detenido las ventas.
El hielo se ha deslizado
como una caricia
por la calle
hacia el fondo.
El aire destroza los mástiles
y hay
menos aire
que ayer.
Las precisiones no se pagan
pero recitan:
“Estarse
de este lado del mostrador
no cambia las cosas”.

Carlos Battilana, Presente continuo.
Viajera, 2010.

Naturaleza muerta, Manet

domingo, 6 de julio de 2014

Karina Maccio en la UNGS

Lectura de Karina Macció el 29 de mayo de 2014 en la Universidad Nacional de General Sarmiento durante el homenaje a Juan Gelman. 




jueves, 3 de julio de 2014

Sugiero mantener la boca cerrada - Virginia Janza

Sugiero mantener la boca cerrada
apretar fuerte los labios
y no permitir la huida
de letras que espanten el candombe interno
evitar el oxígeno
leña seca
caverna querida de todos los fuegos
no
no
no
daña el crepitar
cambia
rellena o encuentra
ausencia en el ritmo
represión total.
Sugiero
la piel bien expuesta
–a su pesar–
porque cuanto más carne
más roja
más suelta
–a su pesar–
supera así los incendios
sobrevive
abierto pozo imparchable
tajo que por fuente
(siempre danzante)
nunca duerme
nunca espera
guardarse de bichos
y se pudre por falta de frío
a la vista de todos
se transforma
algo nuevo
no humano
escapa luz por cada agujerito
oscurece los ojos de a poco
y en la mirada crece

(todavía es capaz de dar vida)

(todavía es
cuerpo de cactus reversible)


Virginia Janza, Lado Géminis.
Viajera, 2012.


Dresden Street, Ernst Ludwig Kirchner